El GLP en España es una de las mejores alternativas para repostar los vehículos a motor. Este carburante es uno de los más eficientes y menos agresivos para el medioambiente. Extraído de yacimientos naturales, su fórmula de fabricación se basa en la conversión de los gases butano y propano a un estado líquido. El ahorro o la posibilidad de conseguir la etiqueta ECO de la DGT en algunos vehículos transformados son solo algunas de las cuestiones clave que han convertido al GLP en España en una de las mejores alternativas de repostaje.
Cuántos vehículos consumen GLP en España
Según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), en España se matricularon solo en 2023 alrededor de 25.000 vehículos GLP, lo que supuso un 75% más que en el 2022, cuando se vendieron 12.713. Sin embargo, una cuestión clave que está alterando el mercado de vehículos español es la posibilidad de llevar a cabo transformaciones de vehículos gasolina o diésel ya matriculados y convertirlos en GLP.
En este caso, las transformaciones no han parado de crecer en los últimos años. En 2021 las conversiones alcanzaron uno de los puntos más altos al realizarse un total de 70.000 transformaciones, un 14% más que en 2020, según datos de la Asociación Española del GLP. Para las entidades que trabajan con el GLP se trataría de una tendencia que se ha mantenido no solo estable, sino creciente a lo largo de los últimos años. En 2023 las transformaciones aumentaron en un 13,9% en términos interanuales, superando las 4.000 unidades, según datos de la Asociación de Transformadores de Vehículos (Astrave).
¿Qué ventajas presenta el GLP en España?
Circulación más limpia: la mayor ventaja del GLP es que su uso mejora la calidad del aire por las bajas emisiones de este carburante.
Circulación más barata: con el GLP se puede ahorrar en combustible entre un 15 % y un 45 %.
Doble depósito: los coches que consumen GLP disponen de un depósito de repostaje extra para este combustible, convirtiéndose en bi-fuel. Esto supone que aumente la autonomía del vehículo y además alarga la vida y reduce el mantenimiento del motor.
Potencia: los vehículos que utilizan GLP no sufren apenas merma apreciable de potencia. De hecho, en vehículos diésel, tenemos el feedback de que aumenta las prestaciones. Podrás disfrutar de tu vehículo, pero contaminarás mucho menos.
Puntos de carga: existen más de 800 estaciones de servicio que cuentan con puntos de carga GLP en España.
¿Qué ventajas económicas tienen los coches que consumen GLP en España?
La transformación de vehículos a GLP en España permite a muchos vehículos obtener la etiqueta ECO y circular libremente, accediendo a las Zonas de Bajas Emisiones y aparcando sin restricciones. También se mantienen los descuentos en el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), el ahorro en el pago del impuesto de matriculación o los beneficios en las zonas de estacionamiento regulado para los vehículos que usan gas GLP en España.
Además, los vehículos de GLP contaminan menos, ya que un coche con GLP emite un 21% menos de C02 que un vehículo de gasolina y un 74% menos de Nox. Si se compara con un vehículo diésel o gasolina, el vehículo propulsado con Autogas GLP emite n 81% menos de partículas (PN).
No obstante, no todos los vehículos pueden obtener la etiqueta ECO al transformarse a GLP:
Si el vehículo es gasolina deberá cumplir la normativa Euro 4 o superior (etiqueta C).
Diésel. Si el vehículo es diésel deberá cumplir la normativa Euro 6 o superior (etiqueta C)
¿Cuál es la situación del GLP en España VS el GLP en Europa?
El Autogas GLP en Europa es el combustible alternativo más utilizado en el continente, habiendo crecido exponencialmente el uso del GLP en los últimos 20 años. Según datos de la Asociación Europea de Gas Licuado hay más de 15.000.000 vehículos que se desplazan con GLP en Europa. Para abastecer esos vehículos existen unos 47.000 puntos de repostaje por todo el continente.
Viajar por Europa con GLP es, por tanto, una alternativa posible y recomendable, ya que es mucho más sostenible que hacerlo con los carburantes convencionales. Para ello solo hay que tener en cuenta el disponer de unos adaptadores GLP para viajar a ciertos países del continente. En iRCONGAS podemos ayudarte si tienes cualquier duda.
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El coste de esta conversión se sitúa normalmente entre los 1.200 y los 3.500 euros, aunque la transformación de coches diésel a GLP puede superar esta cifra. Ahora bien, esta inversión se rentabiliza a los pocos meses de circulación gracias al precio del GLP, inferior al de otros combustibles.
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