Aunque el AUTOGAS GLP sea el combustible alternativo más utilizado en el continente, aún existe bastante desconocimiento sobre su seguridad y efectividad. Para resolver todas las dudas sobre seguridad en vehículos GLP estamos aquí.
El Gas Licuado de Petróleo (GLP) tiene su origen en la primera década de 1900 en los Estados Unidos. Aunque no fue hasta la década de los años 30 cuando se empezó a usar para el transporte. Actualmente ya son más de 15.000.000 vehículos que se desplazan con GLP en Europa y hay, para ello, 47.000 puntos de repostaje por el continente.
Como desde iRCONGAS queremos evitar el desconocimiento te vamos a contar una serie de cosas para que entiendas por que los vehículos transformados a GLP son seguros, además de buenos para el medioambiente.
Informe de seguridad para vehículos GLP
El Real Automóvil Club de España (conocido como RACE) ha realizado pruebas para comprobar que los vehículos GLP son seguros. Se realizaron pruebas de choque y pruebas de incendio. Según los resultados de las pruebas, se observó que los depósitos de GLP y los tubos de alimentación resistieron sin sufrir daños significativos en situaciones de impacto y posible incendio. Estos resultados respaldan la seguridad de los vehículos GLP en estas situaciones específicas y pueden ser consultados a través de diversos videos en su web.
El depósito de AUTOGAS está construido de acero extremadamente resistente a cualquier daño mecánico. En el depósito, para repostar el AUTOGAS está montada obligatoriamente una multiválvula que controla el comportamiento y el flujo de gas.
Pruebas de seguridad
Las pruebas de seguridad no solo comprobaron que el depósito no tenía daños, sino también que seguía siendo seguro. Con el resultado de la prueba de incendio, por ejemplo, se comprobó que el KIT de conversión de AUTOGAS GLP no representaba riesgos ni para los pasajeros ni para los rescatadores, ya que en ningún caso explota.
Para comprobar si el incendio supone un riesgo se realizaron múltiples ensayos por parte de diversas entidades automovilísticas de resistencia al fuego durante los cuales, en condiciones supervisadas y controladas, se incendiaba un vehículo con la instalación de gas montada. Después de unos cinco minutos del incendio controlado se activa la válvula de seguridad debido al sobrepasar el límite de presión en el depósito. La válvula deja salir cantidades pequeñas de gas debajo del automóvil, gracias a lo cual no se provoca ningún peligro de explosión durante las maniobras de evacuación de los ocupantes. Al pasar otros 4 minutos se activó la válvula de fuego que permite vaciar uniformemente el depósito del resto de gas. Una vez terminada la prueba el depósito queda intacto, más allá del chamuscado. Se puede deducir de las pruebas que las garantías de los fabricantes relativas a la seguridad de las instalaciones de gas son muy buenas.
No hay casos registrados de explosión de la instalación con un uso y un mantenimiento adecuados.
Hay que recordar que todos los elementos que conforman un kit de GLP están homologados y se revisan en ITV, tanto cuando se hace la homologación del kit, como en las revisiones periódicas posteriores que tenga el vehículo en la ITV.
Las regulaciones en nuestro país y en Europa son muy rigurosas, gracias a lo cual las instalaciones de GLP son seguras.
El dispositivo está compuesto por
Válvula de llenado, con un limitador que impide repostar el depósito hasta un nivel superior al 80% del volumen geométrico, lo que deja un espacio de reserva para la expansión del combustible y constituye un límite seguro para usar el automóvil sin problemas.
Válvula de cierre, controlada electrónicamente y que se abre sólo en el momento que la instalación de gas está activada.
Válvula de exceso de flujo, que interrumpe la salida de gas tras la rotura de los tubos de suministro de gas al motor cuando la velocidad de flujo aumenta por encima del valor establecido.
Válvula de seguridad, que deja salir el gas hacia el exterior del automóvil en caso de que la presión o temperatura en el interior aumente hasta un nivel peligroso
También se han comprobado las estaciones de repostaje para asegurar su seguridad. Según los estándares internacionales las estaciones deben cumplir con unos requisitos específicos en términos de equipamiento y almacenamiento, garantizando un entorno seguro para el suministro de GLP. Estos requisitos se han comprobado, certificando que también el personal de las estaciones conoce los procedimientos de seguridad necesarios y que cuenta con la formación sobre mantenimiento.
¿Es posible una fuga de gas? Seguridad GLP ante todo
Esta suele ser una de las mayores preocupaciones. La seguridad de los vehículos GLP en este aspecto es máxima, habiendo realizado todas las pruebas pertinentes para ello, como pruebas de presión.
La resistencia del depósito de gas es mucho mayor que la del depósito de gasolina.
En caso de situaciones extremas, tales como colisión con otro automóvil, el depósito simplemente se desplazará o incluso se desprenderá del automóvil intacto.
El depósito toroidal montado en el hueco de la rueda de repuesto puede reforzar la parte trasera del vehículo de forma que este sea menos sensible a deformaciones durante un accidente de circulación.
Además, cuando se instala el depósito GLP como hemos mencionado antes, se incluye en la inserción una electroválvula de corte que cierra la transmisión de gas GLP antes cualquier incidencia. Esta válvula de seguridad evita el riesgo de fugas y se activa cuando la presión aumenta por encima del tarado de seguridad que lleva.
La homologación es la principal garantía para la seguridad del vehículo GLP
Realizar la transformación en un taller especializado y homologado como los de iRCONGAS tiene plenas garantías de seguridad, ya que se emplean solamente KITs que cumplen todos los requisitos internacionales y nacionales recogidos en el Real Decreto 750/2010 sobre potencia, emisiones de CO2, instalación o sistema de diagnóstico OBD.
Como hemos dicho anteriormente, todos los elementos de un kit de GLP están homologados y se revisan en ITV cuando se hace la homologación del kit y posteriores cuando el vehículo pase la ITV periódica.
Los vehículos que vienen ya con el GLP instalado de fábrica cuentan con la homologación del Ministerio de Transportes. Aquellos transformados tienen que seguir la normativa europea y nacional recogida en el Real Decreto mencionado.
Mantenimiento necesario para asegurar la seguridad de los vehículos GLP
Realizar el mantenimiento correspondiente a tu coche adaptado a AUTOGAS GLP es fundamental para asegurarte de que esté en óptimas condiciones. En los vehículos dual fuel o bifuel, las revisiones constan en revisar el sistema de Autogas GLP, tanto visualmente comprobando anclajes, fugas, etc, como electrónicamente mediante un sistema de diagnosis. También se sustituyen los filtros del sistema de Autogas GLP y con ello evitar suciedades en el circuito.
Se recomienda que un taller especializado revise el sistema de GLP cada 20.000 kilómetros o al año, lo que antes suceda. Esto es estrictamente necesario para conservar la garantía del equipo y garantizar el buen funcionamiento del mismo.
Desde iRCONGAS recomendamos que también lleves al día los mantenimientos periódicos que le tocan al vehículo, además de comprobar elementos básicos como las presiones de los neumáticos, kit repara pinchazos, líquidos limpiaparabrisas, refrigerante, aceite, líquido de frenos y escobillas limpiaparabrisas.